RELIQUIAS COTIDIANAS

COROLARIOS

No respires, no me mires, no me cantes

no te rías, no te mueras

no me faltes

Si respiras me ahogaré en tus pulmones

para luego exhalarme en niebla de vino

Si me miras nadaré en los lagrimones

que en piropos dan mis ojos celestinos

Si me cantas clavaré en mí las espinas

del clavel que muerden carmines livianos

en la húmeda tumba entre tus mejillas

cuando piense acariciarlo con mis manos

Si te ríes enjaularé las carcajadas

en el fino espacio entre dos renglones

para así empapar de su eco repicante

mis nocturnas líricas de corazones

Si mueres, una elegía cada mañana

rociará el sol sobre el verde de las hojas

de los sauces que envidiaron el mecer

del roble ala de tu sombrero de copa

No me faltes porque sobran las palabras

los motivos, las razones, la esperanza

para no querer quererte aunque te quiero

para no querer odiarte por venganza

Alejandro Olivares Rodríguez